El Gold Coast Pro 2025 ha arrancado con la fuerza de las olas de Burleigh y la emoción de un Tour que ya entra en su fase más intensa. Este evento, presentado por Bonsoy y patrocinado por GWM, representa mucho más que una parada en el calendario: es una prueba de fuego para surfistas, una cita icónica en Australia y una referencia del Championship Tour (CT) de la WSL.
Desde el primer día, la atmósfera ha sido eléctrica. A medida que los heats avanzaban, las expectativas también subían. Este año, la lucha por el dominio del circuito está más abierta que nunca, y el rendimiento de cada surfista en Burleigh puede marcar la diferencia en la clasificación general.
Burleigh Heads es sinónimo de surf de alto nivel. Esta legendaria ola del Gold Coast australiano ha vuelto a demostrar por qué es tan respetada, secciones potentes, pared definida, y tubos cortos pero intensos.
Las condiciones de la segunda jornada ofrecieron entre dos y tres pies de altura, lo que obligó a los surfistas a leer muy bien la ola y a sacar el máximo de cada sección.
“está claro que la Gold Coast es una ola increíble, pero hay que ver cómo hacen los australianos, si realmente se ponen a nivel y dan un espectáculo en su casa”. Y vaya si lo están dando. Julian Wilson, por ejemplo, ha brillado como en sus mejores tiempos, aterrizando un aéreo con grab que levantó al público.
La conexión con la ola es vital aquí, y solo quienes saben adaptarse a sus cambios repentinos consiguen avanzar. Por eso, Burleigh no perdona, si no estás afinado, quedas fuera.
Uno de los mayores atractivos de este Gold Coast Pro 2025 es el choque entre las grandes potencias del surf. Los brasileños han dominado en los últimos años, pero este año, los americanos están mostrando hambre de revancha.
“Está la hegemonía de los brasileños y hay que ver cómo actúan los americanos, a ver si consiguen quitarles la hegemonía del circuito o no”.
Surfers como Griffin Colapinto, que aterrizó dos aéreos revers en una sola ola, están demostrando que tienen lo necesario para recuperar protagonismo.
Por otro lado, los australianos, que compiten en casa, han salido con fuerza y motivación. Julian Wilson eliminando a Jack Robinson en un a manga muy cerrada es la mejor prueba de ello. “Vamos a ver cómo hacen los australianos en su casa, que es posiblemente lo más aceptado o no”. Hasta ahora, están cumpliendo.
La segunda jornada de competición trajo las primeras eliminaciones tanto en la categoría masculina como femenina. Algunos nombres grandes quedaron fuera, mientras otros encontraron su momento para brillar.
Jack Robinson, uno de los favoritos tras su victoria en Bells Beach, quedó eliminado por sorpresa en el primer heat del día. Julian Wilson, que había llegado desde los trials, supo encontrar una buena rampa para un aéreo que fue clave en su 8.17. El veterano australiano terminó con un total de 15.47, dejando a Robinson tercero y fuera del campeonato.
En el lado femenino, Brisa Hennessy fue otra sorpresa negativa al caer en el heat de eliminación contra Lakey Peterson y la rookie Bella Kenworthy. Lakey, que venía con buen ritmo desde Bells, hizo gala de su fluidez con un 13.76 total. “Me sentí como mi antiguo yo”, declaró.
Además, Rio Waida y Connor O’Leary fueron de lo más destacado en la categoría masculina, mientras Luana Silva se repuso tras un mal inicio y venció en su heat femenino.
Dos nombres brillaron especialmente en esta jornada: Julian Wilson y Griffin Colapinto.
Julian, ex top del CT y ganador anterior del evento, volvió al Tour con estilo. “Ayer solo estaba sintiendo el ritmo, hoy quería traer energía. Aterrizar tres de tres maniobras y con variación… me dejó muy satisfecho”, explicó tras su victoria.
Griffin, por su parte, mostró determinación y estilo. Después de un arranque flojo en 2025, sabía que necesitaba algo grande. Y lo hizo. Su 15.73 total le dio paso al Round de 32 con un surfing moderno y aéreo que le caracteriza.
Ambos surfistas representan la experiencia y la capacidad de reinventarse, algo esencial en una ola tan técnica como Burleigh.
Lakey Peterson ha comenzado a recuperar sensaciones tras un inicio de año complicado. Su actuación en Bells, donde alcanzó los cuartos de final, fue el primer aviso. Aquí en Burleigh, ha encontrado líneas y velocidad para meterse con fuerza en el Round de 16.
Lakey reconoció que era su primera vez surfeando en Burleigh: “Es una ola difícil pero con potencial. Me ayudó mucho estar más tiempo en el agua. Hoy sentí que podía abrir bien los giros”.
Su duelo contra Erin Brooks, otra rookie en alza, promete ser uno de los más interesantes del próximo round.
Para los seguidores españoles, la atención estaba puesta en Nadia Erostarbe, la surfista que este año forma parte del CT. En esta jornada, lamentablemente, fue eliminada en la Ronda de Eliminación frente a Luana Silva y Sawyer Lindblad.
A pesar de la eliminación, su presencia en el evento es histórica y promete más para lo que queda de temporada. No ha sido esta vez, pero su evolución sigue llamando la atención y será clave en eventos venideros.
Con la eliminación round completada, el Round of 32 masculino y el Round of 16 femenino ya están definidos. Hay enfrentamientos que podrían alterar completamente el rumbo del ranking mundial:
Julian Wilson vs. Italo Ferreira: una batalla entre un veterano inspirado y el excampeón mundial brasileño.
Gabriela Bryan vs. Luana Silva: choque entre la número uno del mundo y una rival con confianza renovada.
Caitlin Simmers vs. Stephanie Gilmore: el talento joven frente a la experiencia más laureada del circuito.
Los próximos heats definirán mucho más que quién avanza: influirán en el título mundial y consolidarán o romperán momentum.
El Bonsoy Gold Coast Pro 2025 está cumpliendo con creces las expectativas. La calidad de las olas, las sorpresas, la intensidad de los heats y el ambiente competitivo lo colocan, una vez más, como uno de los eventos más vibrantes del circuito.
Este año no solo se trata de ganar una prueba, sino de demostrar quién está preparado para liderar el Tour. Y mientras los brasileños, americanos y australianos se baten en duelo, el resto del mundo —incluida España con Nadia— sigue muy de cerca todo lo que ocurre en Burleigh Heads.
La batalla está lejos de acabar. Y si algo nos ha enseñado esta segunda jornada es que aquí, nadie está a salvo y todo puede pasar.
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